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Introducción
En la sociedad actual en la que vivimos, a pesar del exceso de estímulos que nos prometen la felicidad, es fácil aburrirse de la comida, de la pareja, del trabajo… Nos aburrimos porque vivimos cerrados a la vida con una mente incapaz de habitar en el momento presente, por eso a continuación te presento cinco maneras de experimentar placer.
No hay nada más placentero que estar vivo cuando amas la vida.
Deja de concentrar tu energía en aquello que no quieres en la vida y empieza a vivir en el sí al amor y al placer. Comienza con un gran sí al despertar y ábrete a vivir con plenitud cada momento.
Experimenta el placer desde un corazón abierto.
El placer es el gran misterio de la vida, te invito a que indagues sobre aquello que de verdad hace aflorar el gozo y el bienestar que ya residen dentro de ti. Y recuerda que todos somos seres originales y genuinos, de este modo lo que es placentero para ti puede ser que no lo sea para otra persona.
Encuentra tu propio placer.
Cinco maneras de experimentar placer
Olfato
El olfato es uno de los sentidos que más nos anclan a nivel emocional. Rápidamente un olor nos puede transportar a una situación o a un recuerdo. De este modo, el olor a leña quemada te puede llevar a tu infancia, el olor a azahar a una tarde de paseo por Sevilla o el olor a mar a la calma y relax. Todas ellas pueden ser sensaciones muy placenteras si nos abrimos a vivirlas con intensidad.
Y a ti… ¿Qué olor te produce placer?
Gusto
Muchas veces comemos con prisas y agobiados perdiéndonos el sabor y por ende el placer que podemos experimentar con la comida que ingerimos. Por lo que tómate tu tiempo para cocinar, para comer y para compartir, diciendo sí al placer de los alimentos de una manera saludable.
Deja de culparte y empieza a deleitarte.
Encuentra donde experimentas placer, quizás en tu caso no sea en el chocolate, lo mismo es un buen jamón o una limonada recién hecha con un toque de hierbabuena. No hay ninguna elección ni mejor, ni peor. Todo puede ser bienvenido.
Vista
Es maravilloso poder abrir los ojos y ver la belleza de la vida. Cuando te rodeas de un entorno natural puede ser un auténtico deleite, contemplar la inmensidad del mar o las altas montañas. También puedes encontrar el placer en mantener tu entorno de trabajo o tu casa limpia y ordenada.
El sentido de la vista también nos incita a la imaginación, contemplar la belleza de tu pareja o la hermosura de sus labios te pueden llevar a vivir un momento de intenso placer sin necesidad de tocarla.
Ábrele la puerta al placer en tu vida desde el amor.
Tacto
La piel es el mayor órgano emuntorio con miles de terminaciones nerviosas que nos invitan a experimentar el placer en la vida. La brisa fresca de la mañana, el beso de tu hijo o la caricia de la persona a la que amas, cuando lo vives con intensa presencia y abierto a la vida pueden ser instantes muy placenteros. Sobre el Dios que nos presenta el filósofo Spinoza, Éste diría: “El sexo es un regalo que te he dado y con el que puedes expresar tu amor, tu éxtasis, tu alegría. Así que no me culpes a mí por todo lo que te han hecho creer”.
Oído
Este sentido te puede transportar a lugares extraordinarios o cambiar tu estado anímico con mucha facilidad. Cuando escuches una canción que te emociona, no te reprimas, deja que el sonido penetre cada célula de tu cuerpo. Permítete vibrar con el placer de escuchar no solo una música, también la naturaleza, el canto de un pájaro o el sonido de una ola…
Tu nivel de intensidad de placer indica cuan vibrante y vivo estás.
También las palabras bellas, amables y compasivas nos pueden llevar a experimentar placer en la vida. Así puede ser muy estimulante una conversación con tu pareja o el encuentro con unos amigos.
Conclusión
Espero que te haya sido provechoso lo expuesto acerca de cinco maneras de experimentar placer. Te invito a que te preguntes ¿Cuánto placer hay en tu vida? ¿En tu soledad? ¿En la compañía de tu pareja? ¿Cuánto placer hay en tu trabajo? ¿En la manera en la que entrenas?…
Deja de culparte por experimentar placer, siempre que lo hagas desde un corazón abierto al amor, y empieza a emocionarte por todo lo que acontece en tu vida. Hay que volver a ser como niños, ellos si que saben lo que es el placer sin juicios, ni preocupaciones, ni condicionamientos humanos. Según Spinoza, Dios hubiera dicho: “Quiero que goces, que cantes, que te diviertas y que disfrutes de todo lo que he hecho para ti”.
¡Respira profundo! Establécete recordatorios que te anclen en el verdadero placer de tu vida. Lo placentera que puede llegar a ser tu vida depende de ti, no de lo que ocurre sino de lo que haces con lo que ocurre.
Di sí al placer de amar, al placer de estar vivo.
Si te gustaría seguir leyendo te invito a que leas el artículo la oxitocina para aumentar tu bienestar.
¿Tienes alguna duda? ¿Te gustaría contarme algo? Por favor, házmelo saber en los comentarios ya sabes que siempre te leo.
Espero nos volvamos a ver pronto.
Cuídate.