Cuatro prácticas para tu crecimiento espiritual

Introducción

En la sociedad actual se potencia el crecimiento personal, pero en muchas ocasiones puedes acabar confundido y agotado. La base de tu bienestar personal es darte cuenta que hay algo dentro de ti que no puede ser perturbado por el continuo cambio de los acontecimientos en este mundo, por ello te presento cuatro prácticas para tu crecimiento espiritual que podrás poner en práctica en tu día a día. 

La verdadera felicidad es tu paz interior.

La alegría es una manifestación externa de tu paz interior.

Tu mayor bien es tu paz interior, no permitas que lo que ocurre en tu vida y las personas aviesas o mal intencionadas con las que tienes que lidiar te la arrebaten, como dice la autora Barbar Marciniak en El libro de los pleyadianos : “Quién te quita tu alegría, te quita tu poder”. No lo permitas. 

Ten el valor de poner límites al mal y ser una persona íntegra. Mira la esencia más allá de la apariencia y comunícate con los demás de tal manera que te haga sentir bien. No necesitas tener razón para ser feliz. 

Cuatro prácticas para tu crecimiento espiritual

Lee las escrituras sagradas

El alimento no es solo lo que entra por tu boca, sino aquello que lo hace por los cinco sentidos. Lee textos sagrados que al aplicarlos en tu vida te lleven a ser mejor persona en todos los roles que desempeñas cada día. 

Sé disciplinado

Al no dejarte llevar solo por tu apegos y aversiones, por hacer solo lo que te gusta en cada momento y decantarte por hacer lo correcto creces de manera espiritual. Tu ego caprichoso ya no gobierna tu vida y eres capaz de ver con mayor claridad cual es la decisión más adecuada en cada momento. 

“Una vida en disciplina es una vida con propósito” Edwin Hernández

Ayuna 

Dale un descanso fisiológico a tu cuerpo, no solo de alimentos quizás también de pantallas o de ambientes tóxicos para que la vida torne a un ritmo más sereno y tranquilo, donde puedas experimentar tu propia paz. 

Para los budistas depuración es sinónimo de iluminación.

Todo el día al ir a dormir practicas el ayuno, dejas de estar haciendo para recogerte en tu esencia, por eso descansar profundamente resulta tan placentero. Dejas de hacer para simplemente ser

Practica la caridad

Al ayudar a otros no estamos ayudando a nosotros mismos, cultivamos la visión correcta de la no separación. Muchas veces al pensar en caridad la asociamos en dinero, pero la mayoría de las personas en el mundo occidental están necesitadas de amor, de una palabra agradable, de una sonrisa desinteresada, de un abrazo… 

El ego se cree separado, el espíritu se sabe que es uno.

También puedes llevar a cabo esta práctica para tu crecimiento espiritual cuidando de los animales, cultivando plantas en casa, preservando el entorno natural que te rodea…

Conclusión

Espero te haya sido provechoso todo lo expuesto sobre las cuatro prácticas para tu crecimiento espiritual. Al final lo que más anhelamos es ser felices para poder compartir esa felicidad con los demás. Si te gustaría seguir leyendo no te pierdas el artículo La búsqueda equivocada de la felicidad.

En caso de tener alguna duda o reflexión al respecto, por favor házmelo saber en los comentarios. Ya sabes que siempre te leo. 

Espero nos volvamos a encontrar pronto. 

¡Cuídate mucho!

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